sábado, 23 de enero de 2010

Marcha del Orgullo 2009

CRÓNICA DE UNA TARDE ANUNCIADA

La tarde Orgullosa estaba anunciada desde hacía rato. Como cada año. Vos no. Y vos tampoco. ¿No sería indispensable una lista de asistentes posibles? Pero no como en FB sino, por ejemplo en cuatro de los puntos de la entrada a la Plaza. Cuatro chonguis libreta en mano y leyendo:-¿Tu nombre? - XY -¿Sos la ex de ¿? – Sí… ¿por?
Lo cierto. Es que solamente dos exes no ‘me fueron’: una vive en Santa Fe, la otra en Puerto Vallarta, México… ¡Dioses!
Llegué temprano y me fui temprano. En verdad, llegué alrededor de 15.30, sol a destajo. Con mi amiga Quilmes habíamos caminado desde casa, en Balvanera, y en un sano ejercicio cívico íbamos adivinando quiénes, de lxs que nos cruzábamos, irían a la Marcha.
Debo admitir que soy una amplia seguidora de lo previo: la previa al boliche, la previa a las marchas, la previa a las reuniones con amigos, la previa al sexo, etcétera. Me gusta ver, literalmente, cómo se avanza, qué se prepara, quién llega primero, quién se puso qué cosa, cómo se va acomodando cada cual en su momento, qué posición podría haber adoptado si X hubiera llegado primerx. Vueltas internas del subconsciente. Rizomáticas, que queda más cool.
Así entonces lo primero: la feria, los carritos, el flaco ofreciendo una maza para darle a la parte del ropero –closet- que más te gustara y descargar así las lágrimas que te costó salir de él –tengo mi pedacito de madera, claro-, los camiones / carroza preparándose en las galas, chicas y chicos muy pero muy jóvenes luciendo sus looks más diversos. Y aquí, aquí me planto. Yo, que ya estoy en la puerta de los fifty, y me nombro ochentosa, sentí ternura y orgullo: a la edad de ellxs, nosotrxs estábamos pensando en cómo hacer para que no se nos notara. Al menos, algunxs ya teníamos relaciones, pero heteros, no fuera cosa. No sé cuántos y cuántas de mi generación tuvieron las agallas para salir del closet a esa edad. Pero sí, ya sé, me vas a decir que yo a mis quince años tenía las botas caminando por la vereda mientras las ametralladoras ululaban de fondo. Ok. Sigo con la crónica. Sí también y como todos los años estaban los de Crónica. Infaltables. Y los de CQC claro. Tan infaltables como lxs monjillxs yorugxs, y lxs polis de la Docta. Pero para cuando llegaron el clero y la ley yo ya estaba haciendo la maleta rumbo a casa.
Antes, un par de horas antes, todas, o casi todas mis exes pasaron por la Plaza. Y como si todo eso fuera poco, al inclinar mis ojos sobre Defensa veo venir a un grupo de estudiantes, alumnos míos. Si vos estás acá y yo estoy acá es por que ambxs sabemos por qué estamos acá, ¿no? Así que nos saludamos, nos abrazamos, se sintieron felices de compartir ese espacio con su profesora y seguí con mi vuelta a la redonda. Aunque la Plaza sea cuadrada. Amigxs, compañerxs de militancia, personajes urbanos, y ese globo de la CHA anudaron la tarde a una noche, que me dijeron, estuvo muy buena. Pero me dijeron. La verdad, UNNA muchas veces sabe que no se hace la Amerika sin que eso deje Cero Consecuencia. Bach… eso dicen.

ese Noviembre 09

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