Yo tenía una mujer que diseñaba mis letras
Ella hace unas piezas de arte verdaderamente exquisitas
Ella es artesana. Ella era mi mujer
Pero un día se despertó un viento enorme
Y se llevó el techo de nuestra casa
Y se la llevó a ella también
-es que es tan flaquita-
Y la volví a ver
Pero cada vez que nos veíamos
Ella me decía: te veo y todo todo todo
Me vuelve dentro y me desarma verte
Entonces
No quiso verme más
Y así seguimos los meses que siguieron
Estirando un silencio
Más sombrío que la noche polar
Menos estrellado que la última tormenta
Casi casi tan triste
Como un cementerio triste
Ella no sabe más de mí que lo que le dejo saber
Yo no sé más de ella que nada
Y los días
Nos enjugan el sabor perdido
Y las noches transcurren entre sus apariciones en mis sueños
Y su denodado silencio
ese 2010
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